Las personas consumidoras mantienen una apreciación neutra sobre la economía
Los consumidores mantienen una actitud neutra. Desde hace 12 meses no hay cambios relevantes en su disposición de consumo.
La investigación advierte de brecha persistente en percepción entre quienes pertenecen a hogares de mejores ingresos y más educación.
La Escuela de
Estadística de la Universidad de Costa Rica anuncia el
comportamiento del consumidor para agosto del 2025, al cumplirse 12
meses en los que la confianza de las personas consumidoras sobre la
economía nacional no presenta cambios.
El indicador se coloca en un valor de 52,3 puntos (en
una escala de 0 a 100), aspecto que continúa evidenciando una la
apreciación neutra sobre la economía nacional. Sin embargo, las
personas consumidoras sí demuestraron un aumento en la
incertidumbre sobre la situación futura de las empresas observadas
en mayo anterior.
El ICC se descompone en dos índices adicionales. Uno de ellos
es el Índice de Condiciones Económicas Actuales (ICEA), que se
deriva de las preguntas que valoran el momento para la compra de
bienes duraderos y la percepción de la situación económica de la
familia comparada con un año atrás. El otro es el Índice de
Expectativas Económicas (IEE), que se obtiene de las preguntas
sobre la situación económica de la familia y de las empresas dentro
de un año, y de la situación del país dentro de los próximos cinco
años. Para calcular ambos índices se procede de manera semejante al
ICC
Se observa un incremento en el porcentaje que espera que las empresas estén peor en los próximos 12 meses. Este cambio coincide con la entrada en vigencia de algunos de los aranceles propuestos meses atrás por el Gobierno de los Estados Unidos.
También, la calificación de la política económica de la actual Administración conserva el balance negativo que había evidenciado desde mayo de 2023, y se mantiene estable desde mayo anterior. No obstante, se observó una expectativa más pesimista sobre la pobreza y el desempleo en el país en los próximos 12 meses, mismo que incrementó los porcentajes de consumidores que esperan que estos problemas sociales se intensifiquen en el país.
En detalle sobre la política económica y social
En agosto, el 29,7 % de los consumidores expresó que el Gobierno
actual hace un trabajo “bueno” (sin cambios), 37,1 %, opinó que
este trabajo es “pobre” (sin cambios) y 28,7 % opinó que hace “lo
necesario”. Aunque la calificación de la actual política económica
se mantuvo estable en los últimos tres meses, las expectativas
sobre la pobreza y el desempleo sí cambiaron.
Se destaca que desde agosto se espera más desempleo y pobreza
para los siguientes 12 meses en comparación con mayo anterior.
Hay más pesismismo, pues un 44,4 % de la muestra espera más
pobreza, el dato creció en casi 10 puntos porcentuales (+9,6), y un
40,8 % espera más desempleo, dato que también crece en casi 8
puntos porcentuales (+7,8).
Respecto al desempleo, el porcentaje de consumidores que espera que esta condición aumente para los próximos 12 meses fue de 40,8 %, casi 8 puntos porcentuales más que en la medición anterior.
En la actualidad, el 55 % de las personas consumidoras cree que es un mal momento para la compra de un vehículo, mientras que un 53 % dijo que son malos tiempos para la compra de una casa.
Sobre el ICC
El cálculo del ICC se hace con las respuestas a cinco preguntas: dos referentes a las condiciones económicas actuales y otras tres relacionadas con las expectativas económicas. Para calcularlo se asigna el valor 100 si la respuesta es favorable, 50 si es neutra o no sabe y 0 si es desfavorable. Luego, se calcula un promedio con los cinco puntajes. El rango alcanza un mínimo en cero, el valor más bajo del ICC, es decir el pesimismo más acentuado. El máximo se alcanza en 100 para demostrar el mayor grado de optimismo. La posición intermedia (ni pesimista ni optimista, neutral, indecisa o de incertidumbre) se alcanza cuando el valor está alrededor de 50.
Desde mediados del 2015, la Encuesta de confianza del consumidor es parte del Sistema Estadístico Nacional (SEN) y se convirtió en una estadística nacional que es reportada a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
