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Letra por letra

Un país de ficciones por hacer

La literatura: un oficio maravilloso que también se ejerce en Costa Rica
5 oct 2021Artes y Letras


Álvaro Rojas Salazar es escritor, docente y especialista en literatura latinoamericana. Actualmente, es el coordinador del Colegio de Costa Rica, instancia del Ministerio de Cultura encargada de promover la literatura a nivel nacional. Foto: Anel Kenjekeeva.

 

Cada vez que decidimos viajar al pasado por medio del pensamiento o de los relatos, nos vemos condicionados por nuestra realidad contemporánea, por nuestro contexto intelectual, por nuestras condiciones personales, entonces, nos encontramos con unos temas que nos interesan y otros que no, unos enfoques que asumimos al tiempo que desechamos otros. Es decir, nuestra mirada siempre es parcial y transitoria.

Una manera de reflexionar sobre la literatura de un país es hacer su genealogía, diseñar una cadena de hitos o momentos determinantes en la historia de esa literatura. Esos hitos son creados por el investigador, escogidos de acuerdo a sus intereses, que pueden contener una visión panorámica o una tentativa de explicación sobre la relación entre la vida social y la producción literaria; también esos intereses pueden estar dirigidos a evidenciar los fundamentos de lo que se ha considerado canónico y abrir avenidas de reflexión sobre textos o autores marginales. Considerando, claro está, que ser canónico o marginal, en sí mismo, no les confiere calidad estética a los textos. 

El ciclo de conferencias sobre la literatura costarricense organizado en el año 2021 por el Colegio de Costa Rica del Ministerio de Cultura y Juventud, en alianza con la Escuela de Filología, Lingüística y Literatura, de la Universidad de Costa Rica; la Maestría en Literatura Latinoamericana, de la Universidad de Costa Rica; la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje, de la Universidad Nacional; la Maestría en Estudios de Cultura Centroamericana, de la Universidad Nacional; y la Biblioteca Nacional, ha buscado acercar al público a una serie de discusiones sobre momentos y temas que consideramos capaces de generar ideas y debates sobre una literatura relativamente reciente y cuyo estudio, generalmente, solo transcurre dentro de las academias.

Discutir sobre literatura implica hablar sobre las subjetividades de una o varias épocas, sobre tendencias estéticas, sobre mecanismos de exclusión o premiación de obras, sobre condiciones sociales de posibilidad para que en un momento histórico hayan surgido unas obras y no otras, para que se hayan recibido mejor unas obras y no otras, para que se hayan leído las obras de una forma y no de otra. Para ello hemos invitado a debatir a escritoras y escritores, a académicos y académicas, a críticos y críticas literarias y cada actividad dentro de este ciclo ha contado con muy buena recepción del público, lo cual nos confirma que ante estas iniciativas la gente responde bien cuando se le ofrecen participaciones de calidad.

Acerca de momentos y obras más lejanos en el tiempo nos quedan los libros escritos por estudiosos de nuestra literatura, algunos ya muertos, como Abelardo Bonilla o Álvaro Quesada Soto, algunas vivas y acompañándonos como Flora Ovares. También, contamos con investigaciones más puntuales y más recientes que, gracias a la participación de sus autores, han iluminado períodos no estudiados o estudiados desde otras perspectivas. A esto lo acompaña la visión de las escritoras y escritores, ya sea que reflexionen sobre el proceso creativo de alguna de sus obras, ya sea que nos traigan sus criterios sobre autores de otro tiempo con quienes se sienten unidos por alguna afinidad.

La literatura ayuda a inventar un país y una nación. Por eso, a su estudio no le es ajena la política, la voluntad de sostener una idea sobre aquello que somos y despreciar otras versiones sobre el mismo asunto: somos pacíficos y no conflictivos, somos demócratas y no autoritarios, excepcionales y distintos, blancos y apegados a la tradición, por dar algunos ejemplos. Esto quiere decir que en la historia de nuestra literatura se han dado luchas por el sentido, políticas de la verdad, luchas para definir cuáles son las ficciones que nos representan mejor, cuáles son las ficciones “de verdad” costarricenses.

Esas definiciones las realizan los críticos literarios, las academias, las editoriales influyentes, los medios de comunicación y llevan consigo discusiones que no son ajenas a las tensiones ideológicas y estéticas de otras regiones del mundo, de Europa, de América Latina, de los Estados Unidos, que son, tal vez, nuestras principales fuentes de influencia literaria.

 

Por medio de su perfil en Facebook, la Biblioteca Nacional de Costa Rica transmite el ciclo de conferencias sobre literatura costarricense, organizado este año por el Colegio de Costa Rica. La Escuela de Filología, Lingüística y Literatura, así como la Maestría en Literatura Latinoamericana, ambas de la Universidad de Costa Rica, son dos de las entidades que colaboran con dicha iniciativa. Foto: Archivo, ODI.
 

 

Los inicios

Ahora, antes de hablar de las tendencias estéticas en la literatura costarricense y de las batallas por la definición de nuestra identidad, ha sido importante ponernos de acuerdo sobre los inicios de esta literatura. Dice Álvaro Quesada Soto que, si bien es cierto que se pueden rastrear algunas manifestaciones de textos literarios en el período colonial, estas son muy poco importantes. Bueno, esa idea, esa apreciación, ha sido cuestionada por investigaciones recientes que parten de un concepto más amplio de lo literario y profundizan en textos surgidos durante esos largos y borrosos trescientos años de colonia española, investigaciones que, ayudadas por los estudios de historiadores, tratan de reconstruir a partir de vestigios o huellas textuales aquel mundo social tan distante y cuyos vacíos de conocimiento despiertan tanta curiosidad. Entonces, a partir de una teoría que cuestiona los géneros literarios tradicionales, a partir del estudio de sermones, noticias, escritos para fiestas, se propone que los inicios de la literatura costarricense se encuentran en aquella época, desde la cual esa literatura pasa al siglo XIX de la independencia y de la formación de la República, hasta llegar a los primeros años del siglo XX, momento de surgimiento de una producción literaria que ha sido objeto de mayores estudios críticos, estudios que discuten entre otras cosas, por ejemplo, el nacionalismo en la literatura.

La polémica sobre el nacionalismo

A finales del siglo XIX se dio un debate en “la ciudad letrada”, un debate entre intelectuales que se preguntaron si Costa Rica tenía materia prima suficiente para escribir literatura o si, por el contrario, era mejor escribir sobre asuntos y escenarios extranjeros. Las élites necesitaban construir una hegemonía y la literatura, sin ninguna duda, contribuye a crearla, a sostenerla en el tiempo y también a cuestionarla. Lo nacional y lo cosmopolita, lo tradicional y lo moderno, el romanticismo y la ilustración, el realismo costumbrista frente al arte extranjerizante. Estas tensiones que recorrieron la modernidad occidental también tuvieron lugar en nuestro país, a su forma, algunas veces mediante discusiones en periódicos, discusiones que en ocasiones nos hacen gracia hoy en día y que vienen a ser síntomas de esas tensiones ideológicas, de esas luchas por definir la identidad nacional y la literatura que mejor la representa, tensiones en las que, parece ser, triunfó el realismo costumbrista, un realismo ingenuo apegado a la tradición, a veces burlón, a veces sencillo y con escasa profundidad subjetiva, con escasa modernidad.

La otra literatura costarricense: esoterismo, viajes y narrativa fantástica en los inicios del siglo XX

Al triunfar el realismo costumbrista, como consecuencia, viajaron a los márgenes otras tendencias literarias, consideradas extranjerizantes como la literatura fantástica u oscura como los textos de naturaleza esotérica. A estas tendencias menos celebradas y menos canonizadas las acompaña una serie de relatos de viajes, ya sea de costarricenses en el extranjero, ya sea de extranjeros en Costa Rica, relatos que al tiempo que recorren tierras y aguas, nos muestran percepciones individuales sobre aquello que se descubre mientras se transita de un lugar a otro.

Parte de la riqueza de las discusiones que han tenido lugar en este ciclo de conferencias sobre literatura costarricense, ha sido abrir nuevas áreas de investigación, nuevas perspectivas críticas sobre textos literarios y sobre la manera en la que ellos han sido pensados.

Las guerras en la literatura costarricense

Este tema despierta interés desde el título ya que, en principio, estamos en un país de paz. Y es verdad que no hemos sufrido tantas guerras y levantamientos armados como algunos de nuestros vecinos centroamericanos, sin embargo, cargamos las nuestras: la guerra de 1856 contra los filibusteros norteamericanos, la guerra de 1921 contra Panamá, la guerra civil de 1948 y también, como dice Macarena Barahona, la guerra de las mujeres dentro del patriarcado.

Cada uno de estos conflictos ha dejado un corpus de textos, novelas, cuentos que, sin embargo, casi siempre, se quedan en los márgenes de las batallas. Este es un tema rico para la interpretación histórica y literaria, rico para pensar y también para crear futuras ficciones, siempre y cuando los conflictos de aquel entonces encuentren un nexo de comunicación con nuestra vida contemporánea.

Crisis y vanguardias: Max Jiménez, Carlos Salazar Herrera y José Marín Cañas 

Ellos son grandísimos escritores que, de alguna forma, con sus cuentos y novelas, confrontaron la tradición del realismo costumbrista, su visión idílica de algunas experiencias sociales y construyeron una estética rejuvenecida que privilegia la percepción subjetiva desgarrada, la naturaleza vista desde la angustia, una literatura que expone el sufrimiento personal en un pueblo pequeño que puede llegar a ser un infierno grande.

A su forma, la literatura de estos tres autores expone dramas sociales sin necesidad de hacer militancia política, sin subordinar la ficción a una idea, un evangelio o una ideología. Son escritores comprometidos con el estudio y la renovación de las formas estéticas, escritores que abrieron un camino, una forma de pensar y expresar a Costa Rica que será continuada en tiempos futuros.

"La literatura ayuda a inventar un país y una nación. Por eso, a su estudio no le es ajena la política, la voluntad de sostener una idea sobre aquello que somos y despreciar otras versiones sobre el mismo asunto: somos pacíficos y no conflictivos, somos demócratas y no autoritarios, excepcionales y distintos, blancos y apegados a la tradición, por dar algunos ejemplos".

Álvaro Rojas Salazar

 

Política y literatura. La generación de los años 40 y 50

Es verdad que no es necesario ser militante de izquierdas para hablar de política en textos literarios, sin embargo, es frecuente que se identifique la literatura comprometida con el pensamiento político de izquierda, así, las utopías sociales, el deseo de transformar el mundo, contagia aquellas ficciones que exponen con indignación injusticias y violencias esperando impactar a los lectores para que estos reaccionen, tomen conciencia y se sumen a los movimientos sociales reivindicativos de derechos para trabajadores, campesinos, mujeres y grupos marginales o subalternos.

La estética de esta generación es neorrealista y la crítica literaria suele vincularla a esa tradición expuesta en el párrafo anterior, influenciada en el contexto costarricense tanto por vivencias nacionales injustas como por acontecimientos internacionales de gran impacto, como la lucha contra el fascismo, la Revolución Rusa, la actividad de los partidos comunistas, la gran depresión de 1929 y también por la literatura derivada de estos contextos sociales.

Escritores como Carlos Luis Fallas, Adolfo Herrera García, Yolanda Oreamuno, Fabián Dobles, Joaquín Gutiérrez, han sido ubicados en este grupo, cada uno de ellos con sus diferencias biográficas, temáticas y estéticas y, aunque hayamos escogido la categoría “generación” para ordenar en el tiempo distintos grupos de escritores, también la crítica la cuestiona por arbitraria, por todo lo que deja por fuera y por lo artificioso de sus límites.

Prospectiva

Estamos a mitad de camino, en los meses siguientes hablará la generación de los años 60 y 70, escucharemos a las voces de fin de siglo y también a aquellas otras más recientes, las dispersas voces de las primeras dos décadas del siglo XXI; discutiremos además sobre el centro y la periferia en nuestra literatura, sobre las políticas del Ministerio de Cultura y Juventud para la literatura y como cierre, en diciembre, el escritor nicaragüense Sergio Ramírez Mercado y el Dr. Werner Mackenbach conversarán sobre la literatura costarricense pensada en el contexto de la literatura centroamericana.

Final 

Siempre es posible pensar de otro modo temas anteriormente estudiados por personas que nos antecedieron. De igual manera, hoy podemos aproximarnos de forma crítica a la literatura costarricense aprovechando nuevas herramientas teóricas, seleccionando textos olvidados que alguna luz nos dan sobre el presente, diseñando estrategias de conexión entre novelas, cuentos o ensayos, estrategias que nos permiten profundizar en las reflexiones sobre lo que somos, sobre lo que se ha querido que seamos y sobre lo que queremos ser. Así es la literatura, un oficio maravilloso que también se ejerce en Costa Rica, un país con muchas ficciones por hacer.

Enlaces a las conferencias

Nombre de la actividad Participantes Enlace
Conferencia: "Orígenes de la literatura costarricense"

Dra. Ruth Cubillo Paniagua, UCR; Dr. Gabriel Baltodano Román, UNA; y Dr. Alexánder Sánchez Mora, UCR.

Moderador: M. L. Álvaro Rojas Salazar, Colegio de Costa Rica, del Ministerio de Cultura y Juventud.

https://fb.me/e/62GGvUFPR
Conferencia: "La polémica del Olimpo vista hoy"

Dra. Flora Ovares, académica jubilada de la UCR; M. Sc. Carlos Cortés, UCR; y Dr. Leonardo Sancho, UCR. 

Moderador: Dr. Mijail Mondol López, UCR y UNA.

https://fb.watch/7u93vFmow0/
Conferencia: "La otra literatura costarricense: esoterismo, viajes y narrativa fantástica en los inicios del siglo XX"

Dr. Carlos Villalobos, UCR; M. L. Karen Calvo Díaz, UNA; y los escritores Alfonso Chase y José Ricardo Chaves.

Moderador: M. L. Álvaro Rojas Salazar, Colegio de Costa Rica, del Ministerio de Cultura y Juventud.

https://fb.me/e/2yELmjavH
Conferencia: "Las guerras en la literatura costarricense"

Dra. Macarena Barahona Riera, UCR; Dr. David Díaz Arias, UCR; Lic. Oscar Núñez, escritor.

Moderador: Dr. Mijail Mondol López, UCR y UNA.

https://fb.me/e/1xvJ2vjUw
Conferencia: "Crisis y vanguardias: Max Jiménez, Carlos Salazar Herrera y José Marín Cañas"

Dr. Gabriel Baltodano, UNA; M. L. Tatiana Herrera, UCR; y Dr. Oscar Alvarado, UCR.

Moderador: M. L. Álvaro Rojas, Colegio Costa Rica, del Ministerio de Cultura y Juventud.

https://fb.me/e/1x5E46Yzd
Conferencia: "Política y literatura. La generación del 40-50"

Dr. George García, UCR; M. Sc. Dorelia Barahona, escritora; Dr. Leonardo Sancho Dobles, UCR; y Dra. Flora Ovares, UNA.

Moderador: Dr. Mijail Mondol López, UCR y UNA.

https://fb.watch/7ueJ-qz2ti/
Conferencia: "La Generación del 60-70 habla hoy" José León Sánchez, Alfonso Chase y Quince Duncan, escritores; y Dra. Ruth Cubillo, UCR. https://fb.watch/8qOWosXJX8/ 
Conferencia: "Políticas culturales, políticas para la literatura. Historia y actualidad"

M. Sc. Diana Rojas, UNA; Dr. Rafael Cuevas, UNA; Santiago Porras, escritor; y Lic. Oscar Castillo, de la Cámara Costarricense del Libro.

Moderador: M. L. Álvaro Rojas Salazar, Colegio Costa Rica, del Ministerio de Cultura y Juventud.

https://fb.watch/8qOTXKSyB4/ 
Conferencia: "¿Literaturas regionales en Costa Rica?: problemas y desafíos para una historia de la literatura costarricense" Dr. Adriano Corrales Arias, Instituto Tecnológico de Costa Rica; Lic. Francisco Rodríguez Barrientos, Instituto Tecnológico de Costa Rica; M. Sc. Francisco Rodríguez Cascante, UCR.

https://fb.watch/8qOwBlV-_D/

 

 

Cuadro: cortesía de Laura Rodríguez, directora de la Biblioteca Nacional de Costa Rica.   

En el marco del Bicentenario de la República, el proyecto Esta palabra es mía les presenta el especial “Letra por letra”, una serie de ensayos sobre la literatura costarricense.
Álvaro Rojas Salazar
Escritor y director del Colegio de Costa Rica
arovnbmjas  @mcjcrrmxj.onmicrosoft.com

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