El Jardín Botánico Lankester (JBL) de la Universidad de Costa Rica (UCR) estrenó nuevas instalaciones que le permitirán en los próximos años ampliar y diversificar las actividades de investigación científica en torno a las casi 1700 especies de orquídeas del país.
Con un área de construcción de 1070 m2, la edificación cuenta con dos plantas donde se ubicarán nuevos laboratorios, un herbario, una biblioteca especializada, un auditorio para la enseñanza y oficinas para los investigadores y asistentes de investigación.
Costa Rica es muy privilegiada por la gran diversidad de orquídeas que existe en el territorio, pero por lo general, los países poseedores de esta biodiversidad desconocen lo que tienen y son las naciones con menor variedad de especies las que realizan la investigación.
Por lo tanto, el JBL se propone crear un banco de ADN que sirva para identificar -con base en datos genéticos- cualquier especie de orquídeas del país. Esta información sería de gran utilidad para instituciones como el Ministerio del Ambiente, cuando requiera identificar una planta que ha sido decomisada, por ejemplo.
“Nosotros estamos en capacidad de hacer un banco de datos genéticos de las orquídeas de Costa Rica que permita acceder al conocimiento de los recursos genéticos de la gran diversidad de especies del país”, expresó el investigador del JBL, Dr. Adam Karremans.
Actualmente, parte del estudio del ADN de las orquídeas se tiene que efectuar fuera del Jardín y del país, y gracias a la creación de los nuevos laboratorios eventualmente se podría realizar todo el proceso, que incluye la extracción, amplificación y secuenciación de ADN.
“Esto nos permitirá colaborar más rápido con investigadores y colaboradores en varios proyectos de investigación. Va a hacer más eficiente el trabajo que hacemos al respecto”, indicó el Dr. Mario Blanco Coto, director del Jardín.
El coordinar de investigación del JBL, Franco Pupulin, aseguró que el nuevo espacio físico dará un gran impulso a la labor que realiza este centro, que ha descubierto, documentado y descrito más de 450 nuevas especies de orquídeas en los últimos 15 años desde su fundación en 1973.
“En los últimos 15 años este centro ha crecido muchísimo gracias al hecho de que la Universidad de Costa Rica decidió en el 2001 transformar un fantástico jardín de plantas en un centro de investigación”, aseguró Pupulin.
Aparte de la investigación, el Jardín Botánico Lankester contribuye con la preservación de colecciones vivas y documentales de orquídeas de gran valor científico, la enseñanza, la divulgación y la educación para fomentar el conocimiento y conservación de estas plantas en el ámbito nacional e internacional.
Además del Laboratorio de Extracción y Amplificación de ADN, otros laboratorios complementarán el estudio de las orquídeas. Estos son el Laboratorio de micropropagación de orquídeas, en el cual se llevarán a cabo técnicas de biotecnología para reproducir orquídeas a gran escala por medio de semillas o de células de las plantas que se extraen en condiciones controladas.