La Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica presenta los resultados de mayo sobre estudio trimestral que mide la confianza de los consumidores en Costa Rica. El indicador muestra que la confianza se mantiene en terreno positivo, pero hay señales de que, a futuro, esta podría deteriorarse.
Aunque para mayo el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) se mantiene en terreno positivo y supera los 50 puntos (52,3), se reconoce que hay menos optimismo. El dato de quienes creen que su ingreso será mayor en los próximos 12 meses bajó de un 57,7 %, registrado en febrero, a un 45,5 %.
El componente del Índice de Expectativas Económicas (IEE) muestra variables que anuncian mayor cautela de los agentes económicos. El porcentaje de consumidores que en los próximos 12 meses espera estar económicamente igual aumentó en 4 puntos porcentuales; y disminuyó (–4,0 p.p.) el porcentaje de consumidores que espera que las empresas estén mejor en el próximo año.
Sobre el futuro de las empresas en el país en los próximos doce meses, en mayo, disminuyó el porcentaje de consumidores que espera que las empresas estén mejor (–4,0 p.p.), y amentó (+6,6 p.p.) el porcentaje que dice no saber qué pasará; hoy un 11,3 % de la población encuestada tiene esa opinión.
Destaca que la expectativa sobre el futuro sigue siendo más positiva que la percepción sobre las condiciones económicas actuales, pero la brecha entre ambos indicadores se está cerrando y es la más baja observada desde mayo de 2019.
La calificación a la política económica de la administración Chaves Robles conserva el balance negativo que se registró desde mayo del 2023, aunque se redujo el porcentaje de personas que opina que el Poder Ejecutivo realiza un trabajo pobre en política económica. En esta encuesta, 26,7 % de los consumidores expresó que el Gobierno actual hace un trabajo “bueno” en materia de política económica (sin cambios). El 34,4 %, opinó que este trabajo es “pobre” (–8,6 p.p.) y un 34,4% opinó que hace “lo necesario” (+6,5 p.p.). El 33 % de los consumidores espera un mayor desempleo y el 56,9% cree que es un mal momento para la compra de carro y casa.
Desde septiembre del 2002, el país cuenta con la medición del Índice de Confianza del Consumidor (ICC). Desde mediados del 2015, la Encuesta del Consumidor es parte del Sistema Estadístico Nacional (SEN) y se convirtió en una estadística nacional que es reportada a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Se asume que el optimismo hacia la economía genera confianza entre los consumidores y, como consecuencia, aumenta el deseo de realizar gastos y contraer deudas. Por el contrario, la incertidumbre produce pesimismo y, por ello, el deseo de reducir los gastos y reorganizar las reservas financieras.